sábado, junio 26, 2010

DRAGÓN


Se comerá el queso. Los ratones ponen un cascabel al gato y eso lleva su tiempo. Viene con otras orugas, seguramente en vías de perecer envenenadas con el insecticida que protege a los rosales del jardín. Sin embargo, a este gusano listo le irá mejor. Sabe que otros comen de lo que suele ponerse en las ratoneras, o eso dicen… Pero con tan buena mesa y mejor apetito acabará transformándose, además, en culebra. Y esto nada más que para empezar: de arrastrase por los suelos a reptil con alas que escupe fuego.

No hay comentarios: