martes, noviembre 27, 2007

TRASCENDENTE INFORTUNIO


El Dalai Lama anuncia un referéndum
antes de su muerte para elegir sucesor

Titular de ABC: 27 de noviembre de 2007


Podemos afirmarlo con toda rotundidad: el Dalai Lama se equivocó a principios del siglo XXI. Eligió la peor fecha posible- el día de difuntos, dos de noviembre de dios mil siete- a fin de comunicar al mundo sus deseos democráticos en materia sucesoria. Y fue así porque los disparos causantes de su deceso- tiroteo mortal aún sin esclarecer- evitaron la convocatoria de un referéndum en el Tibet para nombrar a su sucesor. Tal llamada al voto de los ciudadanos de esa parte de China se habría efectuado desde el mismo instante en el que se certificara el natural deterioro de su mente y consiguiente pérdida de facultades. Tal vez enrabietado durante su agonía, convencido de la posibilidad de regresar según los principios de la Metempsicosis, de la trasmigración, reencarnación y renacimiento, forzó las entretelas del buen orden budista y quiso ser reconocido de inmediato, por el Pachen Lama en el niño más cercano de entre los que asistieran a sus exequias. Pero todo fue en vano porque los rasgos de venganza y empecinamiento que caracterizaban tan anormal propósito hicieron de su camino el de la Palingenesia y la Metensomatosis: vino de nuevo al mundo, sin alma, dentro del cuerpo todavía incorrupto de un niño que había sido enterrado recientemente. Por lo tanto, a pesar de “azafranarse” incluso la piel, y dar muestras obvias de conocer de sí mismo lo que nadie sabía, su condición de Zombie hizo imposible la difusión del mensaje que pretendía hacer llegar al mundo: ¿quién iba a conceder crédito a alguien que tras morir regresa como esclavo de sí mismo y al cabo, postulándose cual Océano de Sabiduría que decía ser?

No hay comentarios: