Un sólo abrazo reconforta y entre los reconfortables hay ocasiones, días y personas. A pesar de la inaprensible lengua de mar que hoy quiso fuera pasto de los peces, Daniel fue de las fiestas la Fiesta y de los cariños el AMOR... Y mucho sol...
Mar
Por Oswaldo Roses
No hay oleaje inútil
del fondo a la arena;
ni sensación ni abismo
para menguar su fuerza.
Sólo es luz fugitiva,
sueño; sólo presencia.
Sólo revuelos cándidos
en la distancia esbelta.
Suspiros y caricias
¿cuánta más brisa ciega?;
sonrisas y canciones
cuanta más mar se deja.
Delicias del azul,
lánguidas, aún velan
como flores del cielo
—paz— espumas enhiestas.
(octubre de 1999)
Por Oswaldo Roses
No hay oleaje inútil
del fondo a la arena;
ni sensación ni abismo
para menguar su fuerza.
Sólo es luz fugitiva,
sueño; sólo presencia.
Sólo revuelos cándidos
en la distancia esbelta.
Suspiros y caricias
¿cuánta más brisa ciega?;
sonrisas y canciones
cuanta más mar se deja.
Delicias del azul,
lánguidas, aún velan
como flores del cielo
—paz— espumas enhiestas.
(octubre de 1999)
1 comentario:
muy bonito
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